Protección activa contra incendios

¿Qué diferencias hay entre protección activa y pasiva contra incendios?

En el ámbito de la protección contra incendios, es imprescindible comprender la diferencia entre seguridad activa y pasiva. Ambos enfoques son fundamentales para garantizar la integridad de las personas, las edificaciones y los bienes. En este artículo, profundizamos en las características, sistemas, normativas y aplicaciones de cada uno de ellos, asegurando así una visión clara y profesional de su papel en la prevención y control de incendios.

¿Qué es la protección activa contra incendios?

La protección activa contra incendios se compone de sistemas que requieren una acción o activación, ya sea automática o manual, para combatir el fuego, el humo y el calor. Su función es detectar, alertar, contener y/o extinguir el incendio una vez iniciado.

Estos sistemas deben ser instalados y mantenidos por empresas habilitadas conforme al RIPCI (Reglamento de Instalaciones de Protección Contra Incendios - RD 513/2017), asegurando su correcto funcionamiento y certificación técnica.

Principales sistemas de protección activa

A continuación, detallamos los dispositivos más comunes de la protección activa contra incendios:

Sistemas de detección y alarma de incendios

Detectan la presencia de humo, calor o llamas y activan alarmas para iniciar una evacuación segura.

Sistemas de abastecimiento de agua

Incluyen depósitos, bombas y redes de tuberías diseñadas para suministrar agua a los sistemas de extinción, como hidrantes y rociadores.

Extintores portátiles

Indispensables para actuar en los primeros momentos del incendio. Existen de varios tipos: extintores de CO₂, de polvo ABC, de espuma y específicos como los extintores tipo F para cocinas industriales.

Sistemas de extinción automática para campanas industriales de cocinas profesionales

Un sistema de extinción automática en las campanas de las cocinas industriales es una instalación que detecta y apaga incendios de forma autónoma, especialmente diseñados para fuegos de aceite, antes de que se propaguen, protegiendo al personal, los equipos y la estructura del local. Su objetivo es ofrecer una respuesta inmediata y minimizar los daños al activar un agente extintor sin necesidad de intervención humana. Aquí es clave contar con una campana extractora industrial con motor que cumpla con los requisitos de seguridad y compatibilidad con estos sistemas.

Sistemas fijos de extinción automática

Entre ellos se encuentran los rociadores automáticos, sistemas por agua nebulizada, espuma, polvo, gases o aerosoles condensados, diseñados para actuar incluso sin intervención humana.

Bocas de incendio equipadas (BIE)

Especialmente útiles en establecimientos públicos o industriales, permiten una intervención rápida y eficaz mediante mangueras conectadas a la red de agua.

Columna seca

Utilizada principalmente en edificios de gran altura, facilita el acceso del cuerpo de bomberos a diferentes plantas en caso de incendio.

Control de humos y calor

Incluyen extractores, compuertas de sobrepresión, barreras de humos y sistemas de ventilación mecánica que permiten mantener las rutas de evacuación despejadas.

Alumbrado de emergencia

Garantiza visibilidad adecuada para evacuar, incluso cuando hay un corte de electricidad general.

Instalación y mantenimiento de la protección activa

Toda instalación debe ser realizada por una empresa instaladora habilitada, acompañada de una memoria técnica, planos, certificados de equipos, cálculos hidráulicos y certificados de ejecución.

El mantenimiento es obligatorio y debe realizarse según lo dispuesto en el RIPCI. Las revisiones deben incluir comprobación de presiones, estado físico de los equipos, recargas, pruebas funcionales y sustitución de componentes caducados.

Conectar estos sistemas a una central receptora de alarmas permite una gestión más eficiente y rápida ante cualquier incidente. En entornos críticos como cocinas industriales, un sistema de extinción automática cocina puede marcar la diferencia entre un susto y una tragedia.

¿Qué es la protección pasiva contra incendios?

La protección pasiva no actúa directamente sobre el fuego, sino que su objetivo es limitar la propagación del incendio, proteger estructuras portantes y facilitar la evacuación. Se integra en la arquitectura y construcción del edificio.

Está regulada principalmente por el Código Técnico de la Edificación (CTE) y el Reglamento de Seguridad Contra Incendios en Establecimientos Industriales (RSCIEI). Las soluciones deben estar ensayadas y certificadas según normativa UNE-EN, demostrando su resistencia al fuego en minutos (EI, REI, etc.).

Elementos clave de la protección pasiva contra incendios

Puertas y portones cortafuegos

Evitan la propagación de llamas y humo entre sectores. Deben tener clasificación EI₂ adecuada al uso del edificio.

Paredes, tabiques y techos sectorizados

Su objetivo es compartimentar el edificio en sectores estancos, permitiendo confinar el incendio en una zona específica durante un tiempo determinado.

Sellado de paso de instalaciones

Evita que el fuego se propague a través de las aberturas creadas por instalaciones eléctricas, de fontanería o climatización.

Protección de estructuras portantes

A través de pinturas intumescentes, morteros ignífugos o placas protectoras, se garantiza que las estructuras no colapsen durante el fuego.

Compuertas cortafuegos y cortinas móviles

Instaladas en conductos de ventilación o como elementos móviles que se activan automáticamente en caso de incendio.

Vidrios resistentes al fuego

Permiten la protección sin perder visibilidad y se emplean en escaleras, salidas de emergencia o compartimentos acristalados.

Instalación y mantenimiento de la protección pasiva

Los materiales y soluciones deben instalarse siguiendo fichas técnicas específicas, que indiquen condiciones de aplicación, fijación, espesor y resistencia al fuego (ensayos bajo normas UNE-EN).

El mantenimiento debe asegurar que los sellados, revestimientos y compartimentaciones no han sido alterados o dañados. Las inspecciones periódicas se exigen en muchos sectores, sobre todo en industrias, hoteles, hospitales y centros comerciales.

Diferencias clave entre protección activa y pasiva

Protección integral: la sinergia entre lo activo y lo pasivo

En un sistema eficaz de protección contra incendios, la clave no está en elegir entre una u otra modalidad, sino en combinarlas estratégicamente. Las soluciones pasivas ganan tiempo, mientras que las activas permiten detectar y actuar sobre el fuego en sus primeras fases.

Una protección completa debe contemplar desde la compartimentación estructural y las puertas EI, hasta los extintores de polvo ABC, sistemas de detección y rociadores automáticos.

En sectores de riesgo alto como cocinas industriales, almacenes químicos o talleres, ambos sistemas deben ser específicos y adaptados a la actividad. Por ejemplo, una cocina profesional debe contar con extintores tipo F, sistemas automáticos de extinción en campanas extractoras y puertas cortafuegos en zonas críticas.

Para estar al día en tecnologías y normativas, conviene seguir publicaciones especializadas como el blog de sistemas contra incendios, donde se analizan casos reales, soluciones técnicas y novedades del sector.

Garantizar la seguridad, cumplir la ley y proteger vidas

Como especialistas en instalación, mantenimiento y legalización de sistemas PCI, recomendamos siempre realizar una evaluación técnica detallada del edificio, que permita implementar una solución personalizada combinando protección activa y pasiva, conforme a la normativa vigente.

Un enfoque profesional y proactivo en PCI no solo es una inversión en seguridad, sino también en tranquilidad, cumplimiento legal y responsabilidad empresarial.